El caso tiene perfiles de internacionalidad, pero la solución es más fácil de lo que se pueda imaginar.
Es necesario considerar que desde el punto de vista italiano, la ley 31.05.1995 N. 218 establece el criterio de ciudadanía, por lo que la sucesión del ciudadano italiano residente en EE. UU se rige por la ley italiana, salvo que el ciudadano italiano haya redactado un testamento en el cual especifica su voluntad que la sucesión se rija por la ley del Estado en que resida.
Entonces, si el ciudadano italiano residente en Florida ha redactado un testamento y ha especificado que su sucesión se rige por la ley de Florida, así será, y esto tiene importantes consecuencias;
Por ejemplo sobre el derecho de legitima, que existe por la ley italiana, pero que está regulado de manera diferente por la ley estadounidense.
Si el ciudadano italiano no opta por esta elección de ley, la sucesión se regirá por la ley italiana.
Desde el punto de vista tributario, por un lado los inmuebles, los depósitos en las cuentas corrientes existentes en Italia y las acciones estarán sujetas a impuestos italianos, por el otro las propiedades, los depósitos en la cuenta corriente, las acciones (assets) existentes en los EE. UU. a los impuestos en los Estados Unidos.
En conclusión, el testamento es de fundamental importancia para la organización de la sucesión, sobre todo para evitar sorpresas desagradables a los beneficiarios.
Milano, 17 Febrero 2021
